Miniatura Set Clontarf Trinity Collection

• 50ml Clontarf 1014 Single Malt, 40% vol.

El whiskey de malta irlandés Clontarf ha sido envejecido en barriles ex-Bourbon, habiendo pasado previamente por el proceso de triple destilado en la destilería Bushmills. Extraordinario en su simplicidad, este whiskey ha esquivado la complejidad por un delicioso minimalismo.

Color: Oro intenso.

Nariz: Intenso aroma de malteado dulce, deliciosas notas de vainilla de madera de roble, caramelo, miel, especias y aceites esenciales.

Boca: Sabores ricos y claro sabor a malta, completo y suave, vainilla de madera tostada y miel, frutal, especiado, floral y aterciopelado.

• 50ml Clontarf 1014 Reserve Irish Whiskey, 40% vol.

Una deliciosa combinación de whiskies de malta y granos nobles. Excepcionalmente fresco, suave y especiado.

Color: oro brillante. Nariz: malta y especias. Sabor: delicioso, fresco, suave y con una complejidad a malta.

• 50ml Clontarf 1014 Classic Blend Irish, 40% vol.

El whiskey irlandés Clontarf Classic Blend ha sido envejecido en barriles ex-Bourbon durante cuatro años. Después de este periodo pasa por el proceso de “marrying” o “vatting” que consiste en mezclar diferentes barriles para conseguir la fusión perfecta. Barriles que provienen de la famosa destilería Midleton y embotellado por Castle Brands.

Color: Oro.

Nariz: Ligero con madera refrescante, miel, roble tostado, vainilla, fondo agradable con sabor a malta.

Boca: Paladar suave y liso, notas de caramelo toffee, vainilla muy agradable de madera de roble y sabores de malteado, con una delicada complejidad.

Clontarf es una marca propiedad de la compañía embotelladora Castle Brands.

En la batalla de Clontarf en 1014, el rey irlandés Brian Boru logró la victoria para los irlandeses sobre los temibles vikingos.

Los dos ejércitos se encontraron en los campos de Clontarf, cerca de la ciudad de Dublín, el Viernes Santo en la primavera de 1014. La batalla duró todo el día y se extendió por los campos y bosques sin que ningún bando obtuviera una clara ventaja. Finalmente, con todos sus líderes muertos o moribundos, los vikingos rompieron filas y regresaron a sus barcos.

De los 8.000 hombres que lucharon ese día, casi 6.000 fueron asesinados. La destrucción de las fuerzas vikingas, incluida la muerte de prácticamente todos los reyes vikingos, puso fin de forma permanente a la presencia de los invasores. A través de esta valiente y sangrienta victoria en Clontarf, Brian Boru y sus hombres hicieron posible la Irlanda que hoy conocemos.