Miniatura Penderyn Single Malt Welsh Whisky

Notas de cata de Penderyn Madeira

Nariz: Un frescor clásico con aromas de toffee, rica fruta y pasas.

Boca: Crujiente y finamente redondeado, con el dulzor para equilibrar una apetecible sequedad. Final: Persisten notas de frutas tropicales, pasas y vainilla.

Equilibrio: Tonos roble vainilla / dulzor seco

Notas de cata de Penderyn Sherrywood

Nariz: Aromas de frutas negras y rico toffee se mezclan con manzanas verdes y avellanas para crear un misterio más profundo.

Boca: El rico dulzor da paso a la sequedad refrescante. Final: Notas dulces de toffee y sultanas persisten en el final largo.

Equilibrio: Jerez y roble / especias de invierno

Notas de cata de Penderyn Peated

Nariz: Se presenta con un humo dulce y aromático. Después, aparecen notas distintivas de vainilla, manzana verde y cítricos refrescantes.

Boca: Una variedad de sabores suaves tienta incluso al paladar más sofisticado. Final: El humo y la vainilla permanecen en el atractivo final de longitud media.

Equilibrio: Ahumado ligero / afrutado cítrico

“Destilar whisky en Gales era un arte perdido..."

Pero a finales de 1990, en un pub de una pequeña localidad post-industrial del valle de Gales, un grupo de amigos bebían y conversaban sobre establecer la primera destilería de whisky en Gales en más de un siglo. Soñaban con la creación de un whisky tan puro y precioso como el oro de Gales, representado hoy por el filón de oro en el logo de Penderyn. Estos amigos contaban con un emplazamiento para la destilería, en el histórico pueblo de Penderyn, en el extremo sur de Brecon Beacons, lugar elegido debido a que tenía su propio suministro de agua fresca proveniente de un manantial natural, requisito imprescindible para la obtención de un whisky excelente.

Para empezar, contaban ya con un tipo exclusivo de alambique de cobre, el ‘single-pot still’, diseñado por el Dr. David Faraday, un pariente del gran científico del siglo 19, Michael Faraday. La tecnología innovadora aplicada a sus alambiques produce no sólo un whisky de cebada de gran complejidad, profundidad y finura, sino que elimina además, casi todos los componentes químicos indeseables que un conjunto convencional de dos o tres alambiques no puede conseguir. Esta es la diferencia más relevante entre los whiskies de Penderyn y los escoceses e irlandeses tradicionales.   

Todos los whiskies Penderyn son embotellados ‘non chill-filtered’, no tratados a muy bajas temperaturas antes del embotellado. Los barriles de roble americano ex-Bourbon los traen de Buffalo Trace y también de Evan Williams Bourbon, quien provenía de Gales y que fue uno de los fundadores de la industria del bourbon en América. El primer whisky Penderyn se lanzó al mercado el día de San David en 2004, con la presencia del Príncipe Carlos de Inglaterra.

Representantes de Penderyn y yo mismo en Alimentaria 2016